Mixtemitl - Macrame y Cemento

Mixtemitl: Donde el Hilo y el Cemento Se Convierten en Arte

En un mundo donde la producción en masa predomina, Mixtemitl se presenta como un refugio de lo auténtico, donde el arte se fusiona con la funcionalidad.

El nombre de la tienda, Mixtemitl, proviene del náhuatl y se traduce como “En la niebla”, un simbolismo perfecto para la esencia de sus piezas. Esta referencia a la niebla, que frecuentemente cubre las montañas de Zacatlán por su altitud, refleja el proceso creativo de Maribel Salas: un camino de exploración que combina lo etéreo y lo sólido, como la fusión del macramé con el concreto.

“Difícilmente hago una pieza exactamente igual a otra”, comparte Maribel, revelando su filosofía de que cada creación lleva consigo un toque único.

Desde tapices decorativos que llenan de vida cualquier espacio, hasta porta macetas que elevan el cuidado de las plantas, sus piezas no solo son ornamentales, sino prácticas y llenas de carácter.

El camino hacia el éxito no estuvo exento de desafíos. Pero las recompensas han sido gratificantes. Un ejemplo es el de una joven que la buscó en Zacatlán, diciéndole: “Son el complemento perfecto para mis plantas, me hacen feliz”. Esto confirma que su arte no solo toca a quienes lo adquieren, sino que genera una conexión genuina con los clientes.

Lo que más disfruta Maribel de su trabajo es el proceso mismo de creación. “Me sigue maravillando tanto como cuando hice mi primera pieza. No necesito herramientas, solo mis manos y la imaginación”. Cada nudo de macramé y cada molde de concreto se convierte en una nueva aventura, donde lo inesperado se transforma en belleza.

Mixtemitl se caracteriza por su constante reinvención, una invitación a descubrir nuevas formas y colores. Las reacciones de los clientes son un testimonio de su éxito, como cuando le dicen: “No puedo creer que esto sea solo cemento”. Maribel ha logrado transformar lo ordinario en algo excepcional.

El arte de Maribel es una flecha en la niebla, una búsqueda constante de lo que puede ser creado, mejorado y compartido con el mundo. Cada pieza es un recordatorio de que lo hecho a mano tiene alma y que, al igual que la niebla en las montañas, su arte es fugaz, pero siempre hermoso y lleno de magia.